Nota publicada: 2024-11-25
La pregunta del millón: ¿De qué depende el éxito de una empresa? La respuesta puede tener un buen número de soluciones, desde tener productos y servicios novedosos, hasta precios competitivos o buenos líderes. Sin embargo, en la actualidad, la evolución y planeación del futuro de la empresa puede ser el aspecto más relevante.
Llevar a una empresa hacia la transformación es una meta crucial que podría parecer sencilla; pero la realidad es que no todas las compañías pueden jactarse de tener lo necesario para dar pasos sólidos en este sentido.
Esta cualidad está impresa en el ADN de firmas como Google, Amazon, Apple, Samsung o P&G, quienes todo el tiempo están analizando cómo evolucionar no sólo sus productos, sino también sus capacidades internas y externas.
En contraparte, otras muchas organizaciones han sufrido por su nula planeación a futuro. Ejemplos no faltan: como Kodak, que no pudo superar la transformación digital de su industria, o Blackberry, quien pasó de éxito al subsuelo en apenas unos años y está al borde de la muerte.
Miedo al futuro para tu empresa
La razón por la que muchas empresas no logran planear sus movimientos es fácil de acotar: Tienen miedo al futuro. Así lo asegura Elena Espinal, Master Coach y autora del libro Ecología del Porvenir, quien sostiene que la clave es adquirir la habilidad de pensar por adelantado para superar las expectativas.
“Solemos tener miedo al futuro. Los mayas pudieron planificar miles de años; pero hoy vas a cualquier tipo de empresa y nadie te sabe decir qué sucederá en los próximos cinco años”, menciona en entrevista.
De acuerdo con la especialista, pensar a futuro y realizar una planeación sustancial de cada una de sus actividades es una obligación que va mucho más allá de los dirigentes.
“Las empresas están hechas para trascender en el tiempo, no viven de acuerdo a una sola persona. Es por eso que su planeación necesita ir mucho más allá que cualquier gestión”, comenta.
Cómo planear el futuro de tu empresa en 5 pasos clave
¿Qué tenemos que hacer para conseguir que nuestra empresa dé pasos en este sentido? Elena Espinal sugiere trabajar en cinco ejes:
1. Escenarios futuros
Primero, realiza un análisis acerca de los distintos futuros posibles de la compañía, dependiendo de las decisiones que se pretendan tomar. La idea es armar un panorama amplio sobre las tendencias que irán apareciendo y la manera en que se pueden aprovechar para cumplir con las metas de la empresa. Cada escenario contará con sus pros y contras, y es básico anotar detalladamente cada uno de ellos.
2. Involucramiento del equipo
Es muy importante que una vez definida la visión del futuro que se tiene para la compañía se comunique a los trabajadores el planteamiento. Aquí es clave escuchar su voz y opinión. Mientras más partícipes logremos que sean en este cambio, mejores serán los resultados. Además, sus ideas pueden servirnos para hacer cambios fructíferos a los planes establecidos. Recuerda: su colaboración es esencial.
3. Adiós al miedo
Muchos trabajadores se sentirán satisfechos con el plan a futuro; sin embargo, otros podrían sentir temores por el cambio que tendrán que realizar en su labor diaria para cumplir con esas expectativas. La especialista sostiene que el miedo al cambio es una resistencia natural del ser humano que es posible atacar fortaleciendo la confianza y evitando la frustración en caso de equivocarse. No lo olvides: fallar es aprendizaje.
4. Líderes en la incertidumbre
Los líderes de las empresas trabajan con datos y resultados a la mano, pero al afrontar un proceso de transformación y planeación a futuro éstos podrían no llegar de la manera en que están acostumbrados. El reto para los ejecutivos será aprender a valorar el trabajo de las personas cualitativamente, hasta que queden amarrados todos los cabos sueltos del proceso y se comiencen a ver resultados. Ojo: no hay un tiempo exacto para esto.
5. Rompiendo barreras
Finalmente, la especialista pide a los ejecutivos y trabajadores terminar con el pensamiento de “si las cosas no se hacen a mi manera, entonces estarán mal hechas”. Cuando se enfrenta un procedimiento de planeación a futuro se deben considerar nuevas técnicas de trabajo, con el objetivo de cambiar personalmente. Espinal señala que tenemos que empezar modificando nuestro interior.