Nota publicada: 2025-11-30
La calabaza ese fruto anaranjado, dulce y versátil es mucho más que un ingrediente decorativo u ornamental: es un alimento con un perfil nutricional impresionante y múltiples beneficios para la salud. Un análisis reciente en Healthline destaca nueve razones por las que vale la pena incorporarla en tu dieta.
Nutrientes esenciales en pocas calorías
Una taza de calabaza cocida (? 245 g) aporta apenas unas 49 calorías, pero ofrece una buena dosis de fibra, vitaminas y minerales: 2 g de proteína, 3 g de fibra, 12 g de carbohidratos, así como vitaminas A, C, E, riboflavina y minerales como potasio, cobre y manganeso.
Además, la calabaza es rica en beta-caroteno —el precursor de la vitamina A— y otros antioxidantes.
Beneficios para la salud
Refuerzo del sistema inmune: La combinación de vitaminas A, C y E ayuda a fortalecer las defensas del cuerpo, favoreciendo la producción y eficacia de las células de la inmunidad.
Salud visual: Gracias al beta-caroteno y a otros carotenoides como la luteína y la zeaxantina, su consumo regular puede proteger la vista y reducir el riesgo de enfermedades oculares relacionadas con la edad.
Apoyo al corazón: Su contenido en potasio, fibra y antioxidantes contribuye a mantener una presión arterial saludable y a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Salud de la piel: Los antioxidantes y vitaminas presentes en la calabaza ayudan a mantener la piel saludable, protegiéndola del daño oxidativo y favoreciendo la producción de colágeno.
Control de peso y digestión: Al ser baja en calorías, rica en agua y con buena cantidad de fibra, la calabaza genera saciedad sin aportar excesos energéticos, lo que la hace ideal para dietas equilibradas.
Potencial protector contra enfermedades crónicas: Los antioxidantes que contiene pueden contribuir a reducir el riesgo de ciertos tipos de cáncer y otras enfermedades crónicas, según algunos estudios.
Muy versátil en la cocina
La calabaza puede incorporarse a la dieta de muchas formas: desde sopas, guisos, purés y cremas, hasta postres, panes o cenas ligeras. Sus semillas también son comestibles y nutritivas.
Importante: Mejor opta por calabaza natural (fresca o cocida) en lugar de preparaciones procesadas o con azúcar añadida, ya que estas últimas pueden restarle lo nutritivo al alimento.
La calabaza es un alimento de temporada que, gracias a su densidad nutricional y bajo aporte calórico —acompañado de vitaminas, fibra y antioxidantes— puede ser un gran aliado para mejorar la salud general: del sistema inmune, vista, corazón, piel, digestión y más. Incorporarla en tu dieta regular es una decisión inteligente para quienes buscan bienestar, sabor y versatilidad en un solo alimento.
Healthline