
Nota publicada: 2025-03-12
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha instado al Congreso de la Unión a acelerar los trabajos para la aprobación de las leyes secundarias en materia energética, con la intención de que estén listas antes del 18 de marzo, fecha emblemática que conmemora el aniversario de la expropiación petrolera. Este llamado busca adecuar la legislación a los recientes cambios constitucionales y revertir gran parte de la reforma energética aprobada en 2013, devolviendo al pueblo de México el control de las empresas públicas Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Durante su conferencia matutina desde Palacio Nacional, Sheinbaum destacó que las modificaciones realizadas en 2013 tenían como objetivo debilitar a ambas dependencias al redefinirlas como empresas productivas del Estado, lo que, según ella, las hizo más ineficientes. Por ejemplo, la CFE redujo progresivamente su producción de electricidad, mientras que Pemex experimentó un endeudamiento sustancial durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, pasando de 68 mil millones de dólares a 132 mil millones de dólares, casi el doble. A pesar de este aumento en la deuda, la producción de petróleo y gasolinas disminuyó, afectando la soberanía energética del país.
La presidenta subrayó que, durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, se logró una reducción significativa de la deuda de Pemex, dejándola en 91 mil millones de dólares. Además, enfatizó la importancia de reintegrar verticalmente a la empresa, ya que contaba con cuatro subsidiarias y más de 40 filiales, lo que dificultaba una administración coordinada. "¡Cómo se puede tener una administración coordinada con 40 filiales? Lo vamos a integrar verticalmente", afirmó Sheinbaum.
La mandataria también resaltó la necesidad de fortalecer a la CFE y a Pemex para garantizar la soberanía energética de México. En este sentido, mencionó que las reformas buscan que la CFE genere al menos el 54% de la electricidad del país, mientras que el sector privado podrá participar en la generación del 46% restante, siempre bajo la supervisión del Estado. Estas medidas pretenden asegurar que las empresas públicas sean las principales proveedoras de servicios como energía e internet, a través de filiales como CFE Telecomunicaciones e Internet para Todos (CFE TEIT).
Sheinbaum enfatizó que la aprobación de estas leyes secundarias es fundamental para consolidar la reforma energética presentada en febrero de 2024 y promulgada en octubre del mismo año. Esta reforma tiene como objetivo principal favorecer a las clases bajas y garantizar que el gobierno pueda declarar a la CFE y a Pemex como empresas públicas, permitiéndoles generar la mayor parte de los recursos energéticos del país.
La presidenta concluyó su mensaje reiterando la importancia de que el Congreso agilice la aprobación de las leyes secundarias antes del 18 de marzo, para que México pueda celebrar el aniversario de la expropiación petrolera con un marco legal que fortalezca a las empresas públicas y garantice la soberanía energética del país.