Nota publicada: 2024-11-13
Puerto Príncipe. Las operaciones en el aeropuerto de Haití fueron suspendidas ayer luego del estallido de violencia en la isla caribeña que esta vez terminó con pandilleros que dispararon contra un avión de Spirit Airlines, hiriendo a un asistente de vuelo, mientras el nuevo primer ministro, Alix Didier Fils-Aimé, rendía protesta.
También cerraron las escuelas, los bancos y las oficinas gubernamentales. Las calles, donde apenas un día antes pandillas y policías se enfrentaban en un intenso tiroteo, estaban vacías.
La violencia resurge después de que un consejo de transición encargado de restaurar el orden democrático en Haití decidiera destituir al primer ministro interino del país, Garry Conille, luego de seis meses en el cargo.
A pesar de que Conille declaró ilegal la medida, el consejo rápidamente nombró al empresario Fils-Aimé como primer ministro interino. Aquél acabó deseando éxito a su sucesor, en una publicación ayer en redes sociales.
Pero muchos haitianos, como Martha Jean-Pierre, de 43 años, tienen poco interés en las luchas políticas que, según los expertos, sólo dan a las pandillas más libertad para expandir su control, mientras Haití se encuentra al borde de la hambruna.
Jean-Pierre fue una de las personas que se atrevieron a recorrer las calles de Puerto Príncipe ayer para vender los plátanos, zanahorias, repollos y papas que llevaba en una canasta sobre su cabeza. No tenía opción, dijo, vender era la única manera de alimentar a sus hijos.
¿De qué sirve un nuevo primer ministro si no hay seguridad, si no puedo moverme libremente y vender mis productos?, declaró, señalando con la cabeza su canasta de verduras. Esta es mi cuenta bancaria, de esto depende mi familia.
Naciones Unidas calcula que las pandillas controlan 85 por ciento de Puerto Príncipe, la capital. Una misión respaldada por la ONU y encabezada por la policía de Kenia para sofocar la violencia de los grupos criminales se encuentra en Haití, pero enfrenta la falta de financiamiento y de personal.
En este contexto, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, hizo un llamado a las autoridades haitianas: Las necesidades agudas e inmediatas del pueblo haitiano exigen que el gobierno de transición dé prioridad a la gobernabilidad por encima de los intereses personales enfrentados de los actores políticos
Washington, que financia en gran parte la fuerza internacional de seguridad desplegada este año en Haití para frenar la violencia de las pandillas, aseguró que trabajará con el nuevo primer ministro, Alix Didier Fils-Aimé.