Luego de que la activista Kenya Cuevas revelara que ha recuperado 69 cuerpos de integrantes de la comunidad LGBTTTIQ que estaban sin identificar en el Instituto de Ciencias Forenses, el Congreso de la Ciudad de México propusó construir centros para proteger los derechos humanos de este sector de la población.
Propuesta de "Casas Arcoíris" para la protección de la comunidad LGBTTTIQLa iniciativa, planteada por la diputada Rebeca Peralta, insta a las 16 alcaldías de la Ciudad de México a considerar en su presupuesto de egresos para el Ejercicio Fiscal 2025 recursos para la construcción y operación de “Casas Arcoíris”. Estas casas servirían como refugio seguro para personas de la comunidad LGBTTTIQ que sean víctimas de agresión, discriminación o hayan sido expulsadas de sus hogares por revelar su orientación sexual. Además, brindarían atención médica, apoyo psicológico y asesoría jurídica.
La Vicepresidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso capitalino, Rebeca Peralta, subrayó la necesidad de que las alcaldías implementen políticas públicas para la protección de los derechos de todas las personas, asegurando que el Congreso vigilará que las alcaldías cumplan con esta iniciativa.
Avances en la implementación de Casas ArcoírisActualmente, ya operan dos Casas Arcoíris en la Ciudad de México: una en la alcaldía Venustiano Carranza y otra en Iztacalco. Peralta enfatizó que las personas de la comunidad LGBTTTIQ son uno de los grupos más vulnerables, señalando que más de la mitad han sufrido agresiones físicas y acoso; 6 de cada 10 han enfrentado discriminación; 1 de cada 3 ha sido expulsado de su hogar por familiares y el 60% ha tenido pensamientos suicidas debido a problemas familiares y de pareja.
“La falta de un hogar seguro y el rechazo familiar empuja a muchas personas, especialmente jóvenes LGBTTTIQ, a una situación de vulnerabilidad extrema, forzándolos a vivir en la calle, donde enfrentan violencia, explotación y abuso. Queremos evitar esto,” explicó Peralta.
El trabajo de Kenya Cuevas en la defensa de la comunidad LGBTTTIQEl domingo pasado, el diario Excélsior informó que la activista Kenya Cuevas ha recuperado 69 cuerpos de personas LGBTTTIQ del Instituto de Ciencias Forenses (Incifo), quienes murieron en situación de calle o por crímenes de odio. Kenya, presidenta de la asociación Casa de las Muñecas Tiresias, ha realizado esta labor durante los últimos ocho años, desde el asesinato de su amiga Paola Buenrostro en 2018. Este crimen impulsó a Kenya a exigir la tipificación del delito de "transfeminicidio".
La lucha de Kenya se concretó el pasado 23 de agosto con la publicación en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México de la 'Ley Paola Buenrostro', que establece hasta 70 años de cárcel para quienes asesinen a una persona trans por razones de identidad o expresión de género.