Elías Quijada
En el invierno, los animales ponzoñosos están resguardados en sitios o rincones que les ofrece una temperatura cálida durante la época del frio, sin embargo, la araña violinista y la viuda negra aún están presentes en patios y hogares de los sonorenses; mientras que los alacranes pueden estar en la ropa guardada o calzado sin uso frecuente, señaló Alf Enrique Meling López.
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El profesor investigador del Departamento de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la Universidad de Sonora mencionó que en el período invernal no se ven de modo frecuente las especies silvestres, pero por las fechas, se acostumbra a limpiar la casa y los cacharros en el patio y es cuando los animales pueden salir, especialmente la araña violinista y viuda negra, las cuales siempre están presentes.
Requieren cuidados médicosIndicó que el piquete de la viuda negra es doloroso con reacción de manera inmediata que habrá de ser atendida por un médico; las personas con picada de esta especie de araña no pasan a cuadros peligrosos a menos que no se actúe de forma correcta.
En el caso de la araña violinista, la introducción del veneno no duele, solo produce comezón y al tiempo aparece la roncha, también en este caso se debe de recibir atención médica para evitar complicaciones de salud.
Evitar cacharrosEn el tema de los alacranes, Meling López, explicó que este tipo de fauna silvestre se puede resguardar en ropa que están en cajas o lugares que no tienen actividad de manera frecuente, recordó que Hermosillo es un sitio que tiene las características para la convivencia del alacrán, en especial de la especie güera que es el más venenoso de la región.
“Todos los alacranes tienen veneno y pueden causar daños a los humanos, es dolorosa la picadura y se debe de estar atentos ante las reacciones, porque algunas personas son alérgicas y puede presentar cuadros complicados en su salud”, agregó.
Subrayó que también se debe de tener cuidado con gatos, perros y algunos pájaros porque son huéspedes de garrapatas, las cuales pueden tener contacto con humanos y producir situaciones de salud complicadas, aunque su mayor presencia es en verano, en invierno también se registran avistamientos de estos insectos que pican y chupan la sangre de las personas y los animales.
“Otro aspecto es evitar los cacharros que son utilizados para la crianza del mosco del dengue, el cual su período fuerte son las temperaturas cálidas, pero se debe de prevenir la proliferación del mosquito infectado”, recalcó.